Ferrari busca reivindicarse con sus hinchas mientras McLaren apunta a acercarse al campeonato.

Ferrari enfrenta su crisis más profunda al llegar al emblemático circuito de Monza, sede del Gran Premio de Italia, donde McLaren, liderado por el australiano Oscar Piastri, se encuentra a un paso de asegurarse el título.

Cero puntos. Esa fue la desoladora cuenta que dejó la escudería italiana tras el Gran Premio de Países Bajos, donde los abandonos de sus dos pilotos marcaron un duro revés en su lucha por el segundo lugar en el campeonato de constructores.

Mientras tanto, el histórico Lewis Hamilton, quien se quedó fuera de la competencia en Zandvoort, se anotó como el primero en sucumbir en este circuito de alta velocidad, seguido por Charles Leclerc, quien terminó haciendo un contacto desafortunado con el italiano Andrea Kimi Antonelli, de Mercedes.

Pese a los contratiempos, Hamilton busca una hazaña.

La Scuderia vio cómo su ventaja sobre Mercedes —su más cercano rival— se desvanecía hasta los escasos 12 puntos. “Teníamos el ritmo suficiente para obtener un buen resultado”, lamentaba el director de Ferrari, Frédéric Vasseur, en una clara señal de frustración.

En el “Templo de la Velocidad” —así se conoce a Monza—, Ferrari podrá contar con el fervor de sus tifosi, quienes esperan ver resurgir al equipo, recordando la alegría del año pasado, cuando Leclerc se alzó con la victoria.

“Esta temporada somos más competitivos, pero en un pelotón tan reñido detrás de McLaren, no podemos cometer errores”, subrayó Vasseur, dejando claro que la presión es intensa.

Para Hamilton, este Gran Premio representa su primera prueba con el mono rojo de Ferrari, y sería el escenario ideal para conquistar su primera victoria en esta mítica escudería, aunque sus posibilidades se ven comprometidas por una sanción de cinco puestos en la parrilla, resultado del GP de Países Bajos.

Mientras tanto, McLaren está en la búsqueda de su 13ª victoria en esta temporada y cuenta con dos de sus pilotos: Piastri y Lando Norris, que lideran con firmeza el Mundial. A tan solo nueve carreras del desenlace, la diferencia de 34 puntos entre Piastri y Norris se antoja como un colchón razonable, mientras que Max Verstappen se encuentra a una distancia abismal de 104 puntos respecto a Piastri.

Cuando se le consultó sobre sus probabilidades de ganar el campeonato, Piastri se mostró cauto: “No diría que mi ventaja es cómoda. Queda mucho por hacer y todo puede cambiar rápidamente”.

Por otro lado, el piloto argentino Franco Colapinto se encuentra en el centro de rumores que apuntan a su posible reemplazo en Alpine por el estonio Paul Aron, quien comenzará a participar en las pruebas libres el próximo viernes en Italia, lo que podría marcar un cambio significativo en su carrera.

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